Proceso descamativo asociado al picor que afecta a la piel.
Las principales causas que pueden provocar que se desencadene un eccema son la convivencia con otras enfermedades, tener algún tipo de alergia, estar en contacto con sustancias irritantes y la propia herencia genética del individuo.
Síntomas e signos:
1-placas rojizas y descamativas
2-picor
Si en algunos casos se produce una reacción inflamatoria importante, en lugar de placas descamativas circunscritas se pude observar la presencia de vesículas con contenido seroso en su interior.
Encontramos dos tipos de eccemas:
Medidas para prevenir un eccema:
Las principales medidas que pueden ayudar a prevenir la aparición de un eccema incluyen:
Tratamiento:
El tratamiento del eccema alérgico de contacto será evitar la sustancia a la que el paciente es alérgico.
En los pacientes con eccema atópico, se eliminarán los alimentos que puedan estar implicados, y se tratarán los procesos infecciosos intercurrentes.
Además, una vez detectados y eliminados los factores desencadenantes, están indicados tratamientos como corticoesteroides –tópicos o sistémicos-, antihistamínicos, cremas hidratantes y antibióticos en caso de sobreinfección bacteriana. En aquellos pacientes con eccema alérgico irritativo, además, se deben dar recomendaciones encaminadas a proteger las zonas afectadas, y en concreto, a las amas de casa a las que se les recomienda el uso de guantes para la realización de tareas domésticas.
La pauta habitual es de una
aplicación, dos o tres veces al día.
El número de aplicaciones
diarias y la duración del tratamiento podrá modificarse según criterio médico.
Se aplicará una pequeña
cantidad de la crema, en capas finas, directamente sobre la parte afectada, practicando un ligero masaje.
Deben lavarse las manos
después de cada aplicación, a menos que sus manos sean la zona a tratar.
La blastoestimulina también se utiliza para las quemaduras , raspadas, ya que es regenerador de la piel, además contiene antibiótico.